Según un estudio publicado por la revista Science los experimentos se llevaron a cabo en ratones, pero los científicos dicen que el mismo mecanismo opera en los seres humanos.
Existen
más de cuatro mil potenciadores o genes modificantes en los animales
que afectan a sus rasgos faciales. Trabajan como disyuntores que
"encienden" o "desactivan" ciertos genes. Para doscientos de estos
potenciadores los científicos determinaron los tejidos concretos por
cuyo crecimiento son responsables.
En
el estudio tres de estos disyuntores fueron eliminados del ADN de los
ratones. En resultado las caras de los animales cambiaron. Aunque,
aparentemente, todos los ratones son iguales cambió la longitud de
cráneo, las formas de los huesos y de los tejidos.
Ahora
los investigadores tratan de encontrar la manera de obtener
instrucciones sobre la formación de la cara en el genoma humano. Los
resultados obtenidos permiten pensar que, en teoría, algún día sería
posible diseñar el tejido deseado a golpe de clic.
Ahora
los científicos esperan que los resultados de estos experimentos les
ayude a corregir los defectos de tejidos óseos y blandos en los seres
humanos, tales como el labio leporino a nivel embrionario.
Foto: Corbis / RT
La verdad qué no sé si alegrarme que nos desmenucen tanto, Sergio. Un abrazo
ResponderEliminarLa verdad querida amiga....es que no es para alegrarse, desde luego para algunos si es motivo de alegria en casos particulares, un abrazo Rita.
ResponderEliminar