En los últimos tiempos, a menudo
se viene hablando que en ese monte será posible quedar con vida,
saboreando de paso el té de hierbas medicinales del lugar, o tratando de
encontrar los tesoros que un ser fabuloso escondió en su cima.
Los
alrededores de Rtanj son el lugar ideal tanto para el descanso moderado
como para el activo. Pero ahora, en los hoteles contiguos son
reservadas plazas a toda hora poco menos que por clanes familiares. En
los periódicos abundan los titulares del tipo de “Matrimonio de Austria
viaja a Rtanj antes del fin del mundo”.
Neboisha
Gaic, director de la agencia de turismo Rtanj señala que el número de
las “reservas” creció en un cincuenta por ciento en los últimos tiempos y
que muchos toman en realidad estos lugares como un refugio. “Es una
especie de paranoia; personalmente no creo en el fin del mundo, pero
muchos creen”. Como sea, el monte de Rtanj, de un kilómetro y medio es
un lugar increíblemente misterioso, añade Neboisha Gaic:
—Durante
el mal tiempo se me estropea continuamente todo, hasta las
computadoras, y no hay defensa que ayude. Es posible que sea obra de
extraterrestres, pero yo no los he visto. Ahora se libran acaloradas
discusiones sobre si este monte es fruto de la naturaleza o es obra del
ser humano. Cuentan que, hace muchos millones de años, Rtanj estaba
cubierto por las aguas del mar de Pannonsk.
Pero, el otrora productor musical y el habitante quizás más conocido del lugar, Dragan Shou, confiesa que vio extraterrestres:
—La
estatura es de dos a dos metros y medio, son increíblemente hermosos y
nos quieren, porque ellos nos crearon. Pueden ser vistos a menudo por
quienes ellos permiten.
Dragan Shou tiene una concepción propia sobre Rtanj:
—Rtanj
es el centro de la Tierra. Aquí vivió el dios Ra. Esta es una pirámide
construida para velar por el desarrollo del globo terrestre. Y es que,
los dioses vivieron en sus días entre nosotros. ¿Quiénes pudieron
construir las pirámides egipcias sino nuestros Padres? ¿Quién pudo haber
levantado una mole de piedra de veinte toneladas, si ello no lo puede
hoy siquiera la máquina más moderna?
Es
verdad que Dragan Shou no cree en el fin del mundo, aunque reconoce que
el “turismo apocalíptico” es una bendición para ese lugar:
—Esto
es excelente para nosotros, para quienes trabajan en el sector
turístico. Gracias a los turistas, pero yo, con toda responsabilidad
declaro: no habrá fin del mundo, este comenzó con la creación del mundo.
El
famoso físico nuclear serbio Liubo Ristovski viene hace tiempo
estudiando el fenómeno del monte Rtanj. En la correspondencia con
nuestra emisora hacía notar un extraño fenómeno: en la cima de este
monte serbio, de la pirámide en Bosnia, y en algunas pirámides en Irán
se ha registrado radiación electromagnética de igual frecuencia, de
veintiocho kilociclos. En realidad, la energía del monte Rtanj es el
enigma principal que da origen justamente a un sinnúmero de teorías.
Sasha
Nadjfei, director ejecutivo de la organización El Espíritu de Rtanj, la
que ha convocado una conferencia científica del 21 al 23 de diciembre
en el lugar de los hechos, explicaba la postura del profesor Ristovski
y, de paso, ofrecía otras informaciones. Sasha Nadjfei indica que,
después de los estudios de la radiación del campo energético de Rtanj,
los científicos llegaron a una conclusión de sumo interés.
—Rtanj
absorbe la energía cósmica y la energía negativa que surge en torno a
ella, y la transforma en positiva. Hemos logrado establecer unos cuantos
puntos, una suerte de volcanes energéticos ubicados a los pies de este
monte.
Rtanj, como toda pirámide,
cuenta con las propiedades adecuadas y en el caso de que una cierta
energía negativa venga dirigida a la Tierra, Rtanj puede atenuarla o
intensificarla.
La gente del lugar ve a menudo globos
luminosos, monocromáticos o ígneos. El fenómeno consiste en que ellos
aparecen en el cielo desde una dirección desconocida “vuelan” digamos
hasta la pirámide y desaparecen en ella.
El profesor
Liubo Ristovski revelaba que a su juicio, la estadía en el monte Rtanj
es útil para la salud, si se toma el hombre no solo como un ser corporal
sino también energético.
Ahora bien, ¿quién o qué fue lo que creó ese monte sorprendente? Entre los científicos no hay consenso, afirma Sasha Nadjfei:
—Es
evidente que, fenómenos atmosféricos como los vientos y las lluvias no
podían determinar la forma de Rtanj. Su geometría es perfecta, en la que
se observa el principio de la “proporción justa”. Rtanj es un monte de
caliza, y el aspecto de pirámide le fue dado por una cierta fuerza o
energía racional. Los constructores antiguos emplearon el potencial
natural y tecnologías desconocidas por nosotros. La caliza está
compuesta de silíceo, el que tiene una malla molecular, de forma
parecida a la pirámide de Keops. De suerte que, Rtanj estaría formada de
micropirámides. Es conocido el experimento del científico checo Karl
Drbal, quien dispuso de cierta manera una hoja de afeitar en una
pirámide de cartón, la que al cabo de un tiempo se humedeció. Ahora,
imagínense el poder que posee una pirámide de un kilómetro y medio de
altura como es Rtanj.
Es cuestión de
cada uno creer o no creer en el Apocalipsis que se aproxima. Si no llega
el fin del mundo, de todas maneras tendrá sentido viajar a Rtanj,
aunque sea para tener un descanso romántico. El té de Rtanj, una planta que crece solo allí, en el declive meridional del monte, posee singulares propiedades afrodisíacas.
sb/mo/sn
Timur Blojín / http://spanish.ruvr.ru