Científicos españoles de la Universitat de Barcelona
han ensayado con éxito una tecnología que permite trasmitir a un robot
todo tipo de movimientos de un ser humano desde cualquier lugar del
planeta.
En busca de hacer desplazar a la gente a otro
lugar sin tener que moverse, los investigadores de la Universitat de
Barcelona llevan ya dos años y medio desarrollando el dispositivo en el
marco de un proyecto de cuatro años.
No obstante, la tecnología ya fue probada con éxito: desde la ciudad de Barcelona los científicos llegaron a hacer repetir los movimientos de un ser humano a un robot que se encontraba en la capital británica, Londres.
No obstante, la tecnología ya fue probada con éxito: desde la ciudad de Barcelona los científicos llegaron a hacer repetir los movimientos de un ser humano a un robot que se encontraba en la capital británica, Londres.
Equipaje imprescindible
El visitante, -como llaman los propios investigadores a la persona
que se teletransporta- transmite al robot (que puede encontrarse en otra
parte del planeta) sus movimientos mediante un traje especial que goza
de diecisiete sensores.
El siguiente componente imprescindible es el casco, que tiene una pantalla frente a cada ojo para que la persona sea capaz de ver en 3D lo que captan las cámaras del robot.
Además, el equipaje goza de altavoces junto a cada oído para que el visitante pueda oír lo que perciben los micrófonos del robot.
En total, el traje pesa 1.300 gramos y, según advierten los especialistas, aprieta un poco el cráneo, debido a que tiene que estar bien sujeto para mantener las cámaras alineadas ante los ojos y no desorientar a los sensores de posición.
El siguiente componente imprescindible es el casco, que tiene una pantalla frente a cada ojo para que la persona sea capaz de ver en 3D lo que captan las cámaras del robot.
Además, el equipaje goza de altavoces junto a cada oído para que el visitante pueda oír lo que perciben los micrófonos del robot.
En total, el traje pesa 1.300 gramos y, según advierten los especialistas, aprieta un poco el cráneo, debido a que tiene que estar bien sujeto para mantener las cámaras alineadas ante los ojos y no desorientar a los sensores de posición.
Proyecto millonario
En el desarrollo de la tecnología participan unos 40 investigadores de
siete países. Está financiado por la Unión Europea con 11 millones de
euros con la perspectiva de que llegue a tener aplicaciones útiles.
Al principio, los científicos pensaron que el sistema podría servir en casos como irse a conferencias sin moverse de casa, llegar a la consulta de un médico que no le puede atender al instante o hacer entrevistas a distancia. Pero parece ser que es capaz de ser útil en muchas otras ocasiones.
Así, se podría enviar a un robot a zonas contaminadas de una central nuclear y controlarlo a distancia o llegar a zonas inaccesibles durante un incendio.
“Pensé que la gente se mueve constantemente de un lado para otro y que no estaría mal si pudiéramos desplazarnos a otro lugar sin tener que movernos”, explica el especialista en ingeniería informática el doctor Slater, destacando que “todavía queda bastante por hacer, ya que el sistema aún es imperfecto”.
“Controlar el cuerpo del robot a distancia y sentirnos como si estuviéramos allí. Es lo que queremos lograr”, destaca el doctor, según el cual materializar la ciencia ficción en la realidad es simplemente... cuestión de tiempo.
Al principio, los científicos pensaron que el sistema podría servir en casos como irse a conferencias sin moverse de casa, llegar a la consulta de un médico que no le puede atender al instante o hacer entrevistas a distancia. Pero parece ser que es capaz de ser útil en muchas otras ocasiones.
Así, se podría enviar a un robot a zonas contaminadas de una central nuclear y controlarlo a distancia o llegar a zonas inaccesibles durante un incendio.
“Pensé que la gente se mueve constantemente de un lado para otro y que no estaría mal si pudiéramos desplazarnos a otro lugar sin tener que movernos”, explica el especialista en ingeniería informática el doctor Slater, destacando que “todavía queda bastante por hacer, ya que el sistema aún es imperfecto”.
“Controlar el cuerpo del robot a distancia y sentirnos como si estuviéramos allí. Es lo que queremos lograr”, destaca el doctor, según el cual materializar la ciencia ficción en la realidad es simplemente... cuestión de tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario