Expertos internacionales se reúnen en Madrid para evaluar los riesgos y exponer estrategias contra una posible amenaza llegada del espacio
ESA
En febrero de 2013 un asteroide explotó en el cielo sobre la región rusa de los Urales
cuando viajaba a 66.000 kilómetros por hora, causando cientos de
heridos y daños multimillonarios. ¿Qué opciones tenemos si se produjese
un suceso similar –o mayor – en el futuro?
De los más de 600.000 asteroides de los que se tiene
constancia en nuestro Sistema Solar, unos 10.000 están catalogados como
NEOs (Objetos Próximos a la Tierra), es decir, sus órbitas pasarán cerca
de la de nuestro planeta. La prueba definitiva de que podrían llegar a
impactar contra la Tierra llegó el pasado día 15 de febrero, cuando un objeto desconocido de unos 17-20 metros de diámetro explotó en el cielo sobre Chelyabinsk, Rusia, liberando una energía equivalente a 20-30 veces la de la bomba atómica de Hiroshima.
La onda expansiva de la explosión causó cientos de heridos y
daños generalizados. Fue el mayor objeto natural en entrar en la
atmósfera terrestre desde el que en 1908 destruyó un área forestal en
Tunguska, Siberia.
Cuándo alertar a la población
“Es importante que seamos conscientes de la posición de los
NEOs con relación a la de nuestro planeta, y que evaluemos la
probabilidad de impacto y sus posibles consecuencias”, explica Detlef
Koschny, Responsable de las actividades relacionadas con los NEOs en la
Oficina del Programa de la ESA para el Conocimiento del Medio Espacial
(SSA, por sus siglas en inglés).
“Y lo que es más importante, tenemos que considerar cuándo y
cómo alertar a la población y las posibles medidas que se podrían tomar
para desviar su trayectoria o mitigar los riesgos. No sólo es
importante para Europa, sino para todo el planeta”.
El Programa SSA de la ESA, que ya ha cumplido cuatro años,
contempla el desarrollo de un sistema integrado para escanear el cielo
nocturno en busca de nuevos NEOs sin catalogar.
Otro aspecto importante del programa es analizar qué
medidas se podrían tomar para mitigar los riesgos que presentan los NEOs
más pequeños, y cómo desviar la trayectoria de los de mayor tamaño que
pudieran constituir una amenaza para nuestro planeta.
Esta semana, Deimos Space, uno de los socios industriales
de la ESA en el Programa SSA, ha invitado a destacados investigadores de
la universidad, institutos de investigación, agencias espaciales
nacionales y de la industria europea y estadounidense para discutir el
estado de la vanguardia en áreas como la evaluación de las consecuencias
del impacto de un NEO o medidas para mitigar sus amenazas. El encuentro
tendrá lugar en la localidad madrileña de Tres Cantos.
“Todavía queda mucho trabajo por hacer, como perfeccionar
los modelos matemáticos que simulan las consecuencias de un impacto,
diferenciando entre las explosiones en el aire o los impactos contra el
suelo, o evaluar las distintas estrategias cinéticas o explosivas para
desviar sus trayectorias, entre otras muchas cosas. El objetivo de este
encuentro es desarrollar una serie de hojas de ruta que guíen la
investigación y el desarrollo actual y futuro en materia de NEOs”,
aclara Gerhard Drolshagen, de la Oficina del Programa SSA.
En última instancia, el Programa SSA de la ESA tiene como
objetivo desarrollar la capacidad de integrar los recursos europeos ya
existentes – tales como los telescopios automatizados – para crear un
sistema coordinado y eficaz para la detección de NEOs, capaz de escanear
el cielo nocturno y de emitir alertas avanzadas.
“Este sistema nos permitirá trabajar junto a otras
agencias, científicos, industria y organismos internacionales como las
Naciones Unidas para ofrecer opciones realistas a los gobiernos”,
explica Nicolás Bobrinsky, Responsable del Programa SSA de la ESA. “Los
sucesos como el de Chelyabinsk demuestran que la amenaza de los NEOs no
es sólo teórica, y que tenemos que invertir en medidas prácticas en el
presente para estar preparados en el futuro”.
ABC.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario